SIENA
PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD
Capital de la provincia del mismo nombre, Siena es una de las más populares ciudades toscanas de Italia posee unos 55.000 habitantes, es una ciudad tranquila y nunca estará completa una visita a Toscana sin pasar por Siena.
Es una ciudad llena de estrechas callejuelas que en zig zag nos conducen a dos puntos neurálgicos de esta ciudad, su plaza en forma de media luna y su magnífica catedral gótica toscana.
Su plaza es de las más bellas y famosas no sólo de Italia sino del mundo entero. Miles de turistas en un día normal pasan por allí para contemplarla.
Rodeada de edificios señoriales, esta plaza es famosa también por sus celebraciones durante dos veces al año (2 de julio y 16 de agosto) de una fiesta llamada carrera Del Palio y de origen medieval.
En forma de anfiteatro esta plaza no es llana y hace pendiente hacia el edificio principal y más elevado de esta plaza, que con su elevadísima torre toscana parece querer tocar el cielo.
Tal vez uno de los edificios más emblemáticos de Siena sea su Palacio Público con su famosa torre y que data del siglo XIV. Las influencias góticas de su arquitectura se mezcla con elementos medievales. Su famoso campanille es tal vez el símbolo por excelencia de la ciudad y posee 400 peldaños para subir arriba. El nombre de la torre es de Torre del Mangia.
La plaza dividida por nueve sectores (se ven en forma de rayas sus particiones) representan a los nueve antiguos representantes de los barrios de la ciudad. La plaza se denomina "Piazza del campo",
La torre del Mangia da sombra a parte de la ciudad dependiendo de la hora del día, es visible desde cualquier punto de la ciudad y antiguamente era también el lugar vigía de intramuros para vigilar los peligros que podían acechar a la ciudad, mide casi 100 metros de altura por lo que para la época no estaba nada mal. Está coronada por una enorme campana denominada "sunto" y de 6.764 kg. de peso.
Otro de los edificios emblemáticos y espectaculares es su impresionante catedral acabada en el siglo XIII que está dedicada a la Asunción de María y construída en estilo gótico toscano.
La catedral de Siena está situada en lo alto de un cerro que domina toda la ciudad. Sus características principales son el estilo "cebra" de la mayor parte del templo exterior e interior tal vez la única excepción es la parte frontal de la catedral.
La parte delantera de la catedral es de un estilo gótico toscano, se nota también en los lados el "rayado" del marmol negro sobre fondo blanco, característica principal de este templo. Se parece mucho a otras catedrales de la Toscana. En su parte superior hay impresionantes mosaicos dedicados a la coronación de la Virgen María.
Pero en su interior se encuentran algunas "joyas" creadas por grandes maestros, como ejemplo este altar dedicado a Ntra. Sra. que fue obra del gran artista Miguel Angel, es solo uno de los ejemplos de las grandes joyas que podemos admirar en este enorme e impresionante templo.
Otra de las grandes joyas que posee esta catedral es su impresionante biblioteca. Ya sólo sus frescos pintados en sus paredes son un buen motivo para una detenida visita.
La cúpula de la catedral de Siena es octogonal, siendo tan solo redonda encima de los soportes de las columnas que la aguantan. Las obras de arte de esta catedral no solo están a rás del suelo sino también en sus techos. No olvidar de visitar el púlpito que es también otra gran obra maestra a la vez que muchos de sus dibujos tallados en marmol en su suelo.
Los colores blanco y negro siempre se han asociado a Siena a los caballos de Senio y Asquio fundadores de la ciudad, sin olvidar la bandera y el escudo de la ciudad que precisamente poseen estos dos colores. Esta catedral tan impresionante en una ciudad relativamente pequeña no dejará indiferente a nadie.
Además de su catedral también hay que visitar su impresionante baptisterio situado en la parte trasera de la catedral y observar detenidamente sus frescos. También existe un museo de verdaderas obras de arte. Una visita que sin duda vale la pena.
Fue en el año 1348 cuando en pleno declive de la comercial de la ciudad se inauguró esta fuente llamada Fonte gala. Obra de la Quercia está construida con un magnífico marmol blanco, aunque hoy día son reproducciones de los originales que se conservan en un museo justo en el edificio de enfrente el Palazzo publico.
Las calles de Siena tienen ese aire medieval y conservan muchos edificios de los siglos XIII y XIV, lo cual ha hecho que la UNESCO haya declarado su centro como Patrimonio de la Humanidad en su sesión XIX en 1.995.
Las calles de Siena están repletos de casas señoriales, palacios, iglesias e incluso una Universidad. Siena hasta el año 1.348 rivalizaba con las mejores ciudades europeas en cultura y potencia económica, sin embargo ese año y debido a la pesta negra que devastó la ciudad y dejó de lado su hasta entonces gran esplendor y ya no pudo rivalizar con su vecina Florencia. Perdió su independencia del resto de la Toscana en el año 1.557 ya que desde ese año pertenece a esta región.
Entre palacios y basílicas no hay que olvidar que Siena también fue el lugar de nacimiento de una de las patronas de Europa: Santa Catalina de Siena. Aún que hoy día el cuerpo está en una tumba en Santa María Sopra Minerva de Roma, su cráneo se encuentra en alguna iglesia de esta localidad.
El Palacio episcopal muy cerca de la catedral da una idea del poder que alcanzó hace algunos siglos esta localidad.
Uno de los atractivos de esta ciudad son sus colinas, y es un placer verlas desde lo alto de la Torre del Mangia, sobretodo al hacer el descanso después de ascender los 400 peldaños. Una maera de descansar es viendo la vista o bien de la plaza o de los tejados a dos aguas de la localidad.
Numerosos son sus monumentos religiosos, además de los grandes palacios que no solo se encuentran en su centro sino que algunos de ellos están situados en las afueras.
Capital de la provincia del mismo nombre, Siena es una de las más populares ciudades toscanas de Italia posee unos 55.000 habitantes, es una ciudad tranquila y nunca estará completa una visita a Toscana sin pasar por Siena.
Es una ciudad llena de estrechas callejuelas que en zig zag nos conducen a dos puntos neurálgicos de esta ciudad, su plaza en forma de media luna y su magnífica catedral gótica toscana.
Su plaza es de las más bellas y famosas no sólo de Italia sino del mundo entero. Miles de turistas en un día normal pasan por allí para contemplarla.
Rodeada de edificios señoriales, esta plaza es famosa también por sus celebraciones durante dos veces al año (2 de julio y 16 de agosto) de una fiesta llamada carrera Del Palio y de origen medieval.
En forma de anfiteatro esta plaza no es llana y hace pendiente hacia el edificio principal y más elevado de esta plaza, que con su elevadísima torre toscana parece querer tocar el cielo.
Tal vez uno de los edificios más emblemáticos de Siena sea su Palacio Público con su famosa torre y que data del siglo XIV. Las influencias góticas de su arquitectura se mezcla con elementos medievales. Su famoso campanille es tal vez el símbolo por excelencia de la ciudad y posee 400 peldaños para subir arriba. El nombre de la torre es de Torre del Mangia.La plaza dividida por nueve sectores (se ven en forma de rayas sus particiones) representan a los nueve antiguos representantes de los barrios de la ciudad. La plaza se denomina "Piazza del campo",
La torre del Mangia da sombra a parte de la ciudad dependiendo de la hora del día, es visible desde cualquier punto de la ciudad y antiguamente era también el lugar vigía de intramuros para vigilar los peligros que podían acechar a la ciudad, mide casi 100 metros de altura por lo que para la época no estaba nada mal. Está coronada por una enorme campana denominada "sunto" y de 6.764 kg. de peso.
Otro de los edificios emblemáticos y espectaculares es su impresionante catedral acabada en el siglo XIII que está dedicada a la Asunción de María y construída en estilo gótico toscano.
La catedral de Siena está situada en lo alto de un cerro que domina toda la ciudad. Sus características principales son el estilo "cebra" de la mayor parte del templo exterior e interior tal vez la única excepción es la parte frontal de la catedral.
La parte delantera de la catedral es de un estilo gótico toscano, se nota también en los lados el "rayado" del marmol negro sobre fondo blanco, característica principal de este templo. Se parece mucho a otras catedrales de la Toscana. En su parte superior hay impresionantes mosaicos dedicados a la coronación de la Virgen María.
Pero en su interior se encuentran algunas "joyas" creadas por grandes maestros, como ejemplo este altar dedicado a Ntra. Sra. que fue obra del gran artista Miguel Angel, es solo uno de los ejemplos de las grandes joyas que podemos admirar en este enorme e impresionante templo.
Otra de las grandes joyas que posee esta catedral es su impresionante biblioteca. Ya sólo sus frescos pintados en sus paredes son un buen motivo para una detenida visita.
La cúpula de la catedral de Siena es octogonal, siendo tan solo redonda encima de los soportes de las columnas que la aguantan. Las obras de arte de esta catedral no solo están a rás del suelo sino también en sus techos. No olvidar de visitar el púlpito que es también otra gran obra maestra a la vez que muchos de sus dibujos tallados en marmol en su suelo.
Los colores blanco y negro siempre se han asociado a Siena a los caballos de Senio y Asquio fundadores de la ciudad, sin olvidar la bandera y el escudo de la ciudad que precisamente poseen estos dos colores. Esta catedral tan impresionante en una ciudad relativamente pequeña no dejará indiferente a nadie.
Además de su catedral también hay que visitar su impresionante baptisterio situado en la parte trasera de la catedral y observar detenidamente sus frescos. También existe un museo de verdaderas obras de arte. Una visita que sin duda vale la pena.
Fue en el año 1348 cuando en pleno declive de la comercial de la ciudad se inauguró esta fuente llamada Fonte gala. Obra de la Quercia está construida con un magnífico marmol blanco, aunque hoy día son reproducciones de los originales que se conservan en un museo justo en el edificio de enfrente el Palazzo publico.
Las calles de Siena tienen ese aire medieval y conservan muchos edificios de los siglos XIII y XIV, lo cual ha hecho que la UNESCO haya declarado su centro como Patrimonio de la Humanidad en su sesión XIX en 1.995.
Las calles de Siena están repletos de casas señoriales, palacios, iglesias e incluso una Universidad. Siena hasta el año 1.348 rivalizaba con las mejores ciudades europeas en cultura y potencia económica, sin embargo ese año y debido a la pesta negra que devastó la ciudad y dejó de lado su hasta entonces gran esplendor y ya no pudo rivalizar con su vecina Florencia. Perdió su independencia del resto de la Toscana en el año 1.557 ya que desde ese año pertenece a esta región.
Entre palacios y basílicas no hay que olvidar que Siena también fue el lugar de nacimiento de una de las patronas de Europa: Santa Catalina de Siena. Aún que hoy día el cuerpo está en una tumba en Santa María Sopra Minerva de Roma, su cráneo se encuentra en alguna iglesia de esta localidad.
El Palacio episcopal muy cerca de la catedral da una idea del poder que alcanzó hace algunos siglos esta localidad.
Uno de los atractivos de esta ciudad son sus colinas, y es un placer verlas desde lo alto de la Torre del Mangia, sobretodo al hacer el descanso después de ascender los 400 peldaños. Una maera de descansar es viendo la vista o bien de la plaza o de los tejados a dos aguas de la localidad.
Numerosos son sus monumentos religiosos, además de los grandes palacios que no solo se encuentran en su centro sino que algunos de ellos están situados en las afueras.
Sena Julia era el nombre original de esta ciudad. La leyenda nos quiere hacer creer que fue fundada por Asquio y Senio que eran los hijos de Remo (sí, el de Remo y Rómulo fundadores de Roma) y ocupa tres colinas, a cual mejor conservada con ese aire medieval que no deja de impresionar. La Toscana no está completamente visitada sin una visita a esta interesantísima ciudad.
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