MILÁN

MILÁN

La capital de Lombardía

Milano es como se le conoce en Italia, es la segunda ciudad más importante del país, pero con unas infraestructuras mucho más avanzadas en algunos casos que la propia capital, caso del aeropuerto de Milán Malpensa que es el más grande de la nación y uno de los más importantes de Europa y por ende del mundo. También se enorgullece de ser el centro financiero y económico más importante de Italia una de las mayores del mundo. Milán también es la capital industrial de Italia y por supuesto la primera de Europa en cuanto a moda se refiere. Ya que aunque hace algunos años estaba repartida entre Londres, París, y la propia Milán esta es la que se ha llevado la fama de indiscutible ciudad de la moda y la que marca todas las tendencias futuras en ese segmento.

Imagen nocturna de la Piazza del Duomo, con la estatua a Victor Manuel II

Pero si hay algun lugar de encuentro principal en Milán esa es la Piazza del Duomo. Indiscutible símbolo de la ciudad y eje de la estructura urbana de esa localidad. Todas las calles principales desembocan en la famosa Piazza del Duomo.

En la Piazza del Duomo se encuentra lo más importante de Milán, tanto su monumental catedral gótica como las famosas galerías de Victor Manuel. Justo enmedio de la plaza está situado un monumento precisamente a Victor Manuel II que culmina con una estatua ecuestre y a ambos lados unos leones que se han convertido en símbolos propios de esta plaza. Otros bellos edificios adornan esta bellísima plaza.

Otro de los más importantes símbolos de Milán es esta Virgen, que se alza a lo más alto del imponente edificio del Duomo o catedral (109 metros) y que los milaneses la llaman cariñosamente "la Madonnina". Se remonta a 1.774 y es de cobre dorado y fué realizada por Giuseppe Perego y que representa la Virgen Asunta. Existía una tradición que ningún edificio en Milán podía superar la altura de esta Madonnina, cosa que no es así ya que el edificio pirelli es más alto, pero arriba de dicho edificio colocaron otra Madonnina.

La catedral de Milán es de las más grandes del mundo y en su interior pueden caber hasta 40.000 personas, si bien su espectacularidad monumental está en su exterior, practicamente cubierta de importantísimas esculturas por todas sus paredes. Algunas de sus ventanas tienen la reputación de ser las más grandes del mundo.

El Duomo es una obra maestra de muchas obras maestras que alberga. Un ejemplo son sus puertas que en sí ya son obras escultóricas importantes. Está construida totalmente por marmol blanco y su construcción duró casi cuatrocientos años.

No fué muy popular su estilo gótico en sus tiempos ya que se consideraba que el gótico era para catedrales francesas y no italianas. Y aunque a lo largo de su historia se intentó cambiar su estilo su gótico sigue siendo absolutamente predominante.

Su exterior es mucho más monumental que su interior. Las famosas puntas góticas coronadas con unas estatuas, estas reciben el nombre de madonninas siguiendo con el cariño que se le tiene a la Madoninna que corona la catedral. A esta catedral que se puede subir arriba, se le puede denominar la gran orgía gótica.

Desde algunas zonas de arriba es visible la entrada principal a las famosas galerías de Vittorio Enmanuelle.

Imposible perderse las espectaculares vistas desde el techo del Duomo hacia todos los puntos de la ciudad milanesa.

Fué el 20 de mayo de 1.805 cuando Napoleón ordenó que se terminase la fachada de la catedral cuando estaba a punto de ser coronado Rey de Italia. Pero hasta bien entrado el siglo XX no se terminó totalmente. En 1.965 se colocaba la última puerta y así acababa definitivamente este gigantesco edificio. De todos modos quedan bloques por esculpir para completar todas las estatuas que todavía hoy faltan.

arte, esculturas, estilo gótico, marmol blanco y rosa conforman un paseo por los techos de esta edificación.

La lluvia que frecuentemente hace acto de presencia en Milán nos puede favorecer el que las podamos ver ejerciendo sus funciones como canalizaciones de agua de las grandes catedrales.

El interior no deja de ser sorprendente. Destaca la tumba de San Carlos Borromeo que fué obispo de Milán (donde murió), pero sin duda lo mas sorprendente está fuera y no dentro...

Desde la Piazza del Duomo podemos entrar a las famosas galerías de Victor Manuel. En uno de sus pasillos nos conduce directamente al famoso teatro de la Scala.

Hoy día se ha convertido en un lugar de ocio y compras en el centro de Milán. Un lugar ideal para pasear en caso (como me tocó a mí) de lluvia.

Su impresionante cúpula de cristal cubren cuatro pisos de espectaculares edificios. Justo debajo la cúpula un mosaico con el escudo de la ciudad nos marca lo que se conoce como el centro de la ciudad.

Abajo: el escudo que nos marca que estamos en el centro de Milán. Es practicamente imposible verlo sin gente ya que contínuamente gente de los cinco continentes pasan a diario por aquí y es donde más fotos se hacen de la ciudad.

Las galerías fueron terminadas en 1.877 y desde entonces ha sido un punto de referencia en esta ciudad.

Tal vez no es impactante e incluso mucho más modesto de lo que nos podemos imaginar, pero sin duda las grandes voces de la lírica del mundo no lo son hasta que pisan el escenario de este teatro. El más famoso del mundo. La Scala de Milán.

Este es el segundo edificio de este teatro ya que el primero fué presa de un incendio en 1.776 después de una gala de carnaval. Este se construyó donde había estado la iglesia de Santa Maria della Scala, de donde tomó su nombre actual. El 3 de agosto de 1.778 se inauguraba con la ópera de Salieri L´Europa riconosciuta. En todo caso la estructura que vemos hoy día es de 1.907 cuando se cambió su diseño por el actual.

No es el mayor escenario del mundo, pero sí el más importante en lo que ópera y lírica se refiere. Al igual que todo el teatro. Aquí triunfan y solo entran los grandes.

Este edificio fué dañado durante la segunda guerra mundial, el 11 de mayo de 1.946 una vez reconstruido empezaba nuevamente sus conciertos.

La temporada de este teatro empieza el 7 de diciembre (San Ambrosio, patrón de la ciudad).

Históricamente este teatro tuvo mucha relación con Verdi, aunque durante muchos años se negó que fueran allí interpretadas sus obras ya que acusó a la orquesta de este teatro de modificar su música.

La Scala está situada justo enfrente del ayuntamiento de Milán en el antiguo Palazzo Marino situado justo al lado de otra entrada a las galerías de Victor Manuel. Estos tres edificios están frente a una plaza donde hay un famoso monumento con varias estatuas. La más alta pertenece al célebre Leonardo Da Vinci.

Primer plano de Leonardo di ser Piero da Vinci, más conocido como Leonardo Da Vinci. Pintor, artista, humanista, científico, ingeniero, urbanista, botánico, músico, poeta, filósofo y escritor. Aunque fué súbito de la entonces República de Florencia pasó en Milán varias épocas de su vida.

Antonio Abondio fué el autor de la fachada de esta famosa casa, en la vía Omenoni 3. Una de las más famosas fachadas de Milán y no muy lejos de la Scala.

Milán vive con el arte tanto antiguo como moderno. Una ciudad tradicional y monumental con los más modernos artilugios de una ciudad que convive con el futuro y la modernidad. Pasear por Milán es encontrarse con el pasado y el futuro.

Edificios históricos se entremezclan con los más modernos edificios y rascacielos.

Edificios que son arte en si mismos y otros con aspectos mucho más modernos.

Una ciudad punta con aspectos relacionados con la buena mesa, modernos hoteles de lujo. Unos servicios dignos de las mejores ciudades europeas.

El transporte no es un problema para esta ciudad. Modernísimos transportes conviven con tranvias algunos de principios del siglo XX. Sus conexiones son inmejorables entre la ciudad, otras ciudades de Italia y de Europa y unas conexiones aéreas que conectan el aeropuerto de Malpensa a unos 60 kilómetros de la ciudad con todo el mundo.

Nada se escapa a los gustos de residentes y viajeros. Cuidados edificios con fachadas atractivas adornadas con luces, todo como la ciudad que representa a la moda.

Sus escaparates son de lo mejor de Europa. Toda Europa está pendiente de las tendencias que salgan de esta ciudad ya que son las que determinarán la moda futura en todos los rincones del mundo.

Los bancos también tienen su importante lugar no solo en Milán, sino que sus bolsas son las que determinan muchas subidas o bajadas en otras de Europa ó del mundo. Una influencia financiera que llega a todo el planeta.

Pero Milán no olvida sus orígenes religiosos. Paseando por las calles más elegantes de Milán uno se tropieza de golpe con esta iglesia con una estética muy Lombarda. San Babila fué considerada la tercera iglesia en importancia después de la catedral y San Ambrosio en Milán. Pertenece al siglo IX aunque en el XVI se reconstruyó.

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SANT´ AMBROGIO

El patrón de Milán es San Ambrosio, cuyos restos se pueden ver en esta basílica de Milán y que constituyen el centro de peregrinación más importante de esta zona. Se construyó en los años 300 en donde eran enterrados mártires cristianos durante las persecuciones romanas.

En la foto de arriba se puede ver el cuadripórtico y su fachada.

Su arquitectura medieval contrasta con aspectos lombardos y románicos. Fué consagrada en el año 387 de nuestra era. Esta iglesia es considerada como una joya histórica y religiosa en plena ciudad de Milán.

En el altar mayor se puede disfrutar de este mosaico incluyendo el pantocrator, rodeado de los arcángeles Miguel y Gabriel y de los mártires Ambrosio y Gervasio.

El famoso sarcófago de Stilicone es lo más antiguo y puro que queda en esta basílica y el propio San Ambrosio ayudó en su diseño. Por ese motivo es tal vez uno de los tesoros de este lugar más apreciados.

Una de las decoraciones en los capiteles del atrio.

Llama la atención sus dos campanarios, lo cual no era nada usual y aunque no tengan la misma altura no rompen el conjunto del edificio. Un campanario pertenece al siglo IX y otro al XII

Santa Maria de la Grazie es una iglesia discreta que fué bombardeada en la segunda guerra mundial. Milagrosamente se pudieron salvar dos frescos muy importantes que hoy son una gran atracción turística, pero que solo contadas personas pueden tener el lujo de visitar.

Una de las obras pertenece a Donato Montorfano y data de 1.495.

Y la otra del famosísimo fresco de Leonardo Da Vinci conocido como "cenacolo vinciano" y más conocido en España como la última cena. Dicen que es una de las pinturas más complejas del mundo. El grado de humedad en la sala y su deteriodo hacen que solo contadas personas puedan visitarla al día.

CASTILLO DE SFORZESCO

Se trata de una importante construcción que servía como residencia a los duques de Milán. Es uno de los castillos más grandes de Europa.

Actualmente es un importante museo con varias dependencias.

Museo Arqueológico con su sección egipcia y de prehistoria.

Museo de Arte antigua con importantísimas obras.

Además posee una importantísima pinacoteca.

Tal vez la obra más famosa que alberga el museo de arte, sea esta piedad inacabada de Miguel Angel conocida como Pietá de Rondanini. Fué la última obra de Miguel Angel ya que murió cuando estaba trabajando en ella.

En agosto de 1.561 aún apenas empezada la obra, Miguel Angel se la regaló a su criado. Más tarde fué adquirida por el Marqués de Rondanini. En 1.952 finalmente fué adquirida por el ayuntamiento de Milán que la tiene aquí expuesta.

También aquí se puede ver el códice trivulziano de Leonardo da Vinci.

Una imagen de San Juan de Nepomuceno saluda a los visitantes que rodeado de cuadros advirtiendo de las obras que pueden verse hacen que la gente se decante hacía un museo del castillo o de otro. En cuanto a las estatuas de San Juan de Nepomuceno que era un santo checo de gran devoción por el norte de Europa, estas eran colocadas por el imperio Austro-húngaro al haber derrocado a los Sforza, anteriores dueños de este castillo y de otros lugares donde también se colocaban estas imágenes de este santo como señal de la victoria de los Austrohúngara en Italia.

Este no es un arco de triunfo, aunque Napoleón ordenó su construcción como tal. Está en la plaza de Sempione. Tiene 25 metros de alto por 24 de ancho. Mientras este ex-arco de triunfo se estaba construyendo, Napoleón fué derrotado en Waterloo, y por tanto cuando este arco se terminó de construir fué el Emperador Francisco I de Austria el que ordenó su finalización y lo nombró "Arco de la paz europea".

Y la vida sigue en Milán, tráfico, modernidad, moda, pero también una impactante historia a sus espaldas.